Hidratación básica para antes, durante y después de correr

No es ningún mito que una correcta hidratación es la clave para el buen desempeño de los corredores, y eso seguro ya lo has experimentado. No hay nada más delicioso que llegar a la meta y tomarte una botella entera de agua como “recompensa” a tu esfuerzo, pero ¿sabes cuánto tomar antes y durante el ejercicio?

Un error común es pensar en la importancia de la hidratación, únicamente, después de correr, lo cual, además de traer consecuencias físicas (muchas veces de peligro), tu rendimiento bajará considerablemente, así que debes poner más atención en ese aspecto.

¿Qué es hidratarse?

Es reponer los líquidos que tu organismo gasta de forma natural, al regular la temperatura del cuerpo, digerir la comida, respirar, etcétera. Además, al estar bien hidratado, tu organismo percibe un menor esfuerzo y podrás rendir mejor mientras corres.

Así que, cuando en tu organismo comienza a subir la temperatura, ya sea por el clima o la actividad física, tiene que trabajar más para enviar sangre a la piel, de modo que se produzca el sudor, y por ello debes estar “rellenando” de líquidos considerablemente.

No olvides que una mala hidratación te “quema” antes de tiempo, así que por ello es la importancia de hidratarse antes, durante y después del running.

¿Cuánto tomar antes?

Debes hidratarte con agua o bebidas deportivas que tengan una concentración menor a 6% de hidratos de carbono.

4 horas antes de ejercicio debes tomar de 300 a 400 mililitros.

2 horas antes de correr debes tomar de 200 a 300 mililitros.

¿Cuánto tomar durante?

Mientras haces ejercicio deberías beber de 90 a 100 mililitros cada 15 o 20 minutos.

Recuerda que la deshidratación es un aspecto de cuidado, sobre todo en tiempos prolongados de running.

¿Cuánto tomar después?

Al terminar una carrera, lo recomendable es tomar 1.5 litros de líquido por cada kg de peso corporal perdido durante cada ejercicio. (La forma para saber esto es sencilla: pésate antes y después de correr, así sabrás cuánto peso pierdes en promedio).

TOMA NOTA: Después de un entrenamiento intenso o de más de 60 minutos, es importante que la bebida aporte electrolitos, en especial sodio, pero también calcio, potasio y magnesio. Una bebida deportiva te funcionaría perfecto.

¡Ten cuidado con cada aspecto de tu hidratación! No importa si tu distancia es corta, siempre debes seguir estas reglas básicas.