Beneficios de los alimentos congelados (Parte 1)

Con una amplia variedad de opciones, piensa más allá de sólo poner fresas en tu smoothie post-carrera. Aquí están algunas formas innovadoras de utilizar las frutas y verduras congeladas para potenciar el sabor y los nutrientes en cada comida.

 

Los corazones de alcachofa congelados poseen un sabor dulce y brindan seis gramos de fibra en media taza. Un estudio en The American Journal of Clinical Nutrition siguió cerca de 90 mil sujetos durante seis años y medio; encontró que aquellos que comían más fibra bajaban de peso a diferencia de los que tenían dieta baja en fibra.

Alcachofa y pasta pesto

En un sartén, saltea 85 gramos de camarones y una taza de corazones de alcachofa congelados durante tres minutos. Revuelve con pasta de grano entero cocida, 1/4 de taza de pesto y media taza de jitomates rebanados.

 

Un estudio del Nutrition Journal se descubrió que las zarzamoras tienen cerca del doble de poder antioxidante, incluyendo potentes antocianinas, que los arándanos, frambuesas y fresas. Cada taza de zarzamoras congeladas contiene ocho gramos de fibra y abundante manganeso, mineral necesario para huesos fuertes y tejido conectivo muscular saludable.

Aderezo de zarzamora

En la licuadora, bate media taza de zarzamoras derretidas, dos cucharadas de aceite de oliva, una cucharada de vinagre balsámico, una cucharada de miel y un manojo de menta fresca. Esparce algunas espinacas.

 

Se trata de un vegetal colmado de nutrientes para corredores, incluyendo folato, vitamina C, fibra y potasio. Este último trabaja para mantener el balance de fluidos en el cuerpo y ayuda a mantener la correcta contracción y relajación de los músculos. Ya que perdemos potasio a través del sudor, necesitamos sustituirlo continuamente ingiriendo alimentos altos en potasio.

 

Descongela y seca una bolsa de coles de bruselas congeladas. En un tazón, bate dos cucharadas de miel maple, una cucharada de aceite de oliva, dos cucharaditas de mostaza granulada y sal. Rebana las coles por la mitad, envuelve con la mezcla maple y asa a 200º C durante 20 minutos.

 

Los frijoles lima, que sólo están disponibles frescos unas semanas durante el verano, son ricos en fibra y potasio, además de proveer 12 gramos de proteína por taza. Adicionalmente agregan cierta dosis de hierro en tu dieta. 

 

Pon en el microondas dos tazas de frijoles lima congelados hasta que se cocinen. Mezcla con dos cucharadas de aceite de oliva, 1/3 de taza con olivo, un pimiento rojo rebanado, 30 gramos de queso feta, una cucharada de cáscara de limón, perejil picado, sal y pimienta. Sirve como guarnición o como tentempié.