5 cosas que debes evitar en tu dieta de corredor

El running es una disciplina que exige tiempo, por lo que necesitas buscarle un espacio en tu apretada agenda para poder entrenar. Sucede lo mismo con la hora de la comida, lo que comes y como lo comes es cosa seria y exige tiempo para que esto no pueda ser negativo para tu cuerpo. Conoce algunos de los errores más comunes en la dieta de las personas y cuida tu manera de comer.

 

En un estudio publicado en 2009 en Preventing Chronic Disease, los investigadores analizaron las compras en Starbucks y Donkin’ Donuts en Nueva York durante 11 semanas. Encontraron que dos tercios de las compras en Starbucks y un cuarto en Donkin Donuts eran “cafés mezclados” que promediaban 239 calorías. Los investigadores advirtieron que 200 calorías extra al día podían llevar a una ganancia de 10 kilos en un año.

Nueva rutina: Cambia a cafés sencillos, que casi no contienen calorías. Si te encantan las bebidas especiales, elige un tamaño menor con leche sin o baja en grasa y evita la crema batida que las acompaña. 

 

Los corredores entienden que es importante hidratarse antes de un entrenamiento, pero muchos no advierten que también deben tomar antes de sentarse a comer. De acuerdo a un estudio publicado en The American Journal of Clinical Nutrition, las personas que toman dos vasos de agua antes de las comidas pierden más peso que aquellos que no beben. Comes menos porque tu estómago se siente lleno, lo cual ayuda a reducir tu ingesta calórica e incentivar la pérdida de peso.

Nueva rutina: Antes de comer bebe uno o dos vasos de agua o una taza de té. Un tazón de sopa tendrá un efecto similar.

 

Un estudio publicado en The American Journal of Clinical Nutrition examinó las dietas de más de 300,000 adultos y encontró que aquellos que comían más carne ganaban más peso (cerca de dos kilos adicionales) durante cinco años que aquellos que consumían menos carne.

Nueva rutina: Si estás intentando perder peso, una dieta basada en plantas con un poco de carne es mejor. Frutas, verduras y granos enteros tienen menos calorías por gramo

 

Las listas de ingredientes y los hechos nutricionales en los alimentos enlatados te ayudarán a  determinar los méritos relativos de un producto. De hecho, un estudio reciente publicado en The Journal of Consumer Affairs encontró que los adultos que leen las etiquetas nutricionales son más propensos a perder peso que los no-lectores.

Nueva rutina: Enfócate en los hechos nutricionales para limitar los que son clave, tales como las calorías, grasas saturadas, sodio y revisar los ingredientes. Recuerda revisar el tamaño de las raciones, que comúnmente son absurdamente pequeñas.

 

Comer mientras hacen otras tareas puede ser contraproducente, de acuerdo a un estudio publicado en The Journal of Consumer Affairs. Este comportamiento hace más difícil monitorear la ingesta calórica. Terminas comiendo más rápido, lo cual lleva a consumir calorías de más y ganar peso.

Nueva rutina: Apaga la TV, quita el periódico y concéntrate en tu comida. Es importante tener un lugar para comer. Si sueles comer tu almuerzo en tu escritorio, deja de navegar por tu correo entre cada bocado. Si estás en casa, no comas en el sillón, siéntate en la mesa. Haz de comer un compromiso y disfrútalo.