¿Lesionado? ¡Recupérate con Cross-Training!

Hacer Cross-training puede ser la solución para evitar muchas lesiones.

 

La potencia, resistencia y tenacidad de un corredor pueden llevar a éste a enfocar sus esfuerzos en las extremidades inferiores y dejar casi olvidada la labor de ejercitar el resto de los músculos. Por lo anterior, usualmente se recurre al Cross-Training para evitar lesiones y salir de la rutina. Sin embargo, la condición para correr no se traduce a otras actividades que usan los músculos y articulaciones de diferente manera. Olvidarse que en otros ejercicios un corredor es todo un principiante lo hace más vulnerable a las lesiones. Es importante entender y conocer los tres problemas más comunes en corredores, esto te beneficiará cuando decidas realizar otras actividades como el Cross-Training sin incidente alguno. 

 

El ciclismo y el spinning son buenos auxiliares para fortalecer las piernas, pero a menos de que poseas unos zapatos que se adhieran a los pedales, estás trabajando los cuadríceps y por tanto aumentando la diferencia.

Ojo, no sólo necesitas empujar el pedal, sino volverlo a jalar hacia arriba y eso es lo que fortalece estos ligamentos. Cuida la técnica. 

 

 

Agregar un entrenamiento de fuerza a tu rutina te ayudará a mantener la técnica en las últimas fases de la carrera, cuando el cansancio atenta contra ella.

Con pesas, calienta ligeramente con unas repeticiones fáciles y después busca tus pesos máximos. Entrena entre el 50 y 75 por ciento de eso. 

Nadar es una actividad alterna ideal para los corredores ya que representa un excelente trabajo de cardio sin impacto para las rodillas y fortalece todos aquellos músculos que al correr olvidas.

 

Estos ejercicios ayudan a construir fuerza central, concentración, equilibrio y (una cualidad muy importante para los corredores) flexibilidad. Tu instructor puede ayudarte a usar cintas de yoga para facilitar dichas posiciones.