¿Las freidoras de aire son buenas como dicen?

Con toda la emoción al rededor de las freidoras de aire ¿son realmente saludables?

Los expertos analizan si cocinar tus frituras “al aire” es una mejor manera de preparar tus alimentos que con aceite.

Las freidoras de aire son algo así como el George Foreman Grill del 2019: se promocionan como una manera fácil de preparar algunos de tus alimentos favoritos, no tan saludables como: ¡pollo frito crujiente! ¡Papas fritas doradas! ¡Pescado frito! Ok todo frito pero ¡Mucho mejor para ti! Sin sacrificar nada de la delicia. Mucho mejor, de hecho, aseguran que puedes comer tan a menudo como quieras con cero sentimiento de culpa.

Pero, ¿es eso realmente cierto? Aquí puedes leer cómo funcionan estos nuevos y modernos electrodomésticos de cocina, si freír al aire es una mejor opción que freír, y si las freidoras son realmente el tipo de cosa que se puede usar todos los días.

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Como ya mencionamos los creadores de las freidoras de aire aseguran que es una mejor opción para “freír” tus alimentos en comparación a una freidora de aceite en donde sumerges tus alimentos en grasas saturadas. 

Las freidoras con aire pueden dar a los alimentos una textura crujiente con solo una fracción del aceite que necesitas para freír. Eso es posible porque las freidoras transfieren calor a los alimentos a través de la grasa líquida. Pero las freidoras de aire transfieren calor a través de la convección, donde un ventilador hace circular rápidamente el aire caliente y rocía pequeñas gotas de aceite alrededor de la comida.

«La circulación de aire caliente y la exposición de 360 ​​grados a los alimentos imita el resultado de la fritura al producir una capa crujiente y dorada», explica Alon Chen, CEO y fundador de la firma de análisis de tendencias Tastewise.

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El mecanismo de convección significa que las freidoras con aire solo necesitan una cucharada de aceite para dar a los alimentos una textura similar a la frita. Y como para empezar no se usa mucho aceite, se deduce que los alimentos fritos con aire absorben considerablemente menos grasa que sus homólogos fritos. “Incluso la sartén requiere varias cucharadas a 1/2 taza de aceite. Y más grasa equivale a más calorías en general «, dice la nutrióloga Sarah Pflugradt.

Toma por ejemplo un muslo de pollo frito te sumará alrededor de 250 calorías y 19 gramos (g) de grasa. Pero un aire frito solo tiene 135 calorías y 5 g de grasa. Y si bien eso puede parecer poco, si comes muchos alimentos fritos, es el tipo de cosa que puede aumentar el riesgo de obesidad o el aumento de peso con el tiempo.

La fritura al aire también podría ayudarte a evitar las grasas trans, la grasa procesada dañina que puede aumentar tu riesgo de enfermedad cardíaca y diabetes tipo 2. Muchos restaurantes fríen sus alimentos en aceites vegetales que contienen grasas trans, como la soya o la canola. Y se ha demostrado que reutilizar el aceite para freír, ya sea en un restaurante o en casa, aumenta la presión arterial y el colesterol y causa inflamación vascular.

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También está el tema de los carcinógenos. En comparación con la fritura profunda, también se ha demostrado que la fritura al aire produce significativamente menos acrilamidas, compuestos nocivos que se forman cuando los aminoácidos de los alimentos, como las papas o el pan, se calientan a temperaturas muy altas. Pero cuando se trata de cocinar carne, las altas temperaturas de ambos métodos de cocción tienen el potencial de formar compuestos llamados hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP) y aminas heterocíclicas (HCA), especialmente si la carne se quema. Y todos estos productos químicos podrían aumentar el riesgo de cáncer, según el Instituto Nacional del Cáncer.

Las comidas fritas con aire tienden a ser más bajas en calorías y grasa que las fritas, lo que con el tiempo podría ser mejor para tu cintura. Pero eso es solo el comienzo. La fritura al aire puede ayudarte a evitar las grasas trans y proteger la salud de tu corazón. También puede reducir tu exposición a compuestos nocivos como las acrilamidas, que se han relacionado con el cáncer.

Eso no quiere decir que freír al aire es el método de cocción perfecto o superior. Todavía es mejor comer más frutas y verduras frescas y carnes magras y proteínas todos los días. «No creo que la fritura al aire se deba usar todos los días», dice Pflugradt. «Solo podemos asumir que las freidoras con aire son seguras a menos que se realicen estudios para demostrar lo contrario».

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Según los expertos de Cleveland Clinic, las altas temperaturas utilizadas por las freidoras de aire hacen que aún sea fácil carbonizar o quemar sus alimentos, lo que podría exponerlo a posibles carcinógenos como HCA y PAH.

Entonces, ¿vale la pena una freidora? Depende. «Si generalmente fríes tus alimentos, freírlos al aire puede ser una gran alternativa», dice Pflugradt. Solo asegúrate de usar un aceite saludable para el corazón como el aceite de oliva en lugar de aceites vegetales como la soya o la canola. Y cocina los alimentos hasta el punto de cocción, pero trata de no dejar que se quemen.

Por otro lado, una freidora por aire probablemente no valga la pena si solo comes alimentos fritos de vez en cuando. «No veo daño en complacerte con tus comidas favoritas de vez en cuando», dice Pflugradt. En otras palabras, está bien disfrutar ocasionalmente de las papas fritas cuando sales a cenar, siempre y cuando te mantengas con métodos de cocina saludables, como asar, hornear o saltear, en casa.

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