EL ÁCIDO LÁCTICO ES TU AMIGO, NO TU ENEMIGO

Los científicos ahora discuten la noción de que los corredores y otros atletas han aceptado por años – que el ácido láctico es un desperdicio de lo músculos generado por las demandas anaeróbicas de energía. Esta teoría estaba basada en experimentos en músculos de las ranas realizados por el Premio Nobel, Otto Meyerhoff en 1920. En contraste, estudios recientes sugieren que el lactato producido por los músculos, ayudan al entrenamiento de alta intensidad. 
 
George A. Brooks, profesor de biología integrativa en University of California, Berkeley, es uno de los que retan los descubrimientos de Meyerhoff. De acuerdo a Brooks, el ácido láctico no es un desperdicio como producto, sino que es un combustible para los músculos. El sugiere que nuestros cuerpos generan el ácido láctico y lo convierte en lactato, el cual es convertido por las células en una fuente importante de energía. Un estudio de 2004 hecho por California State University, en Sacramento, confirma la idea: “si el músculo no produce lactato por el ejercicio, el rendimiento se vería severamente afectado”, escribió.
 
Lo que es un hecho es que las investigaciones siguen avanzando y cada vez es más recurrente encontrar opiniones que dicen que el ácido láctico tan estigmatizado, tiene más beneficios de los que podían pensarse.