¿Cuándo es necesario para un corredor visitar al podólogo?

 

El impacto que tienen los pies con el suelo, provoca que se puedan dañar las uñas, al grado en que pueden, incluso caerse, generando bastantes molestias.

 

Cortar las uñas de cierta manera (línea recta), limarlas e incluso el adecuado uso de los tenis pueden beneficiarte para que no te lastimes, y evitar que sea todo un problema entrenar.

 

Hay ocasiones en que nuestras uñas se pongan negras, pero es importante identificar el dolor, si no sientes molestias, no te preocupes, con el paso del tiempo irá curándose poco a poco.

Tip: En el momento en que veas que tu uña se pone de color negro, debes reducir el kilometraje. No fuerces tu cuerpo a que sufra una lesión más grande que pueda dejarte fuera de las pistas por mucho tiempo, identifica el problema a tiempo.

 

El hecho de que las uñas se vuelvan de color negro o morado, es porque hay sangre debajo de ellas. En caso de que exista dolor, lo más recomendable es acudir al podólogo, porque puede existir alguna ampolla llena de sangre y necesite la valoración de un especialista.

 

Las uñas enterradas pueden ser sumamente dolorosas para un corredor, debes cortarlas una vez cada 10 días, porque tenerlas largas puede generar más problemas de los que pensamos.

Tip: En caso de que tengas uñas enterradas, lo recomendable es ir al podólogo para que haga lo necesario. No intentes cortarla, puedes llegar a lastimarte seriamente y esto puede detener tu entrenamiento algunos días.

 

Las ampollas son un problema que afecta a todos los corredores, y prevenirlas puede ser fácil al utilizar el calzado adecuado. No obstante, en caso de que presentes una ampolla en plena carrera, lo mejor es drenar el agua para evitar que se desprenda la piel y te duela bastante.

Tip: Puedes buscar algún objeto filoso o incluso con el segurito con el que detienes tu número, para hacer un pequeño agujero y drenar el agua, después pega la piel para que evite más la fricción.

Al cabo de unos días tu ampolla sanará y no será necesario visitar al podólogo.

 

Las callosidades, a pesar de ser estéticamente feas, son comunes en el pie del corredor por el simple hecho de la fricción con el calzado, o incluso por tener una sobrecarga en un lugar específico al pisar.

Tip: Lo recomendable es limar esas partes donde existen callosidades de vez en cuando, pero no es necesario visitar a un podólogo. Cuida tus pies con el calzado adecuado y la higiene necesaria.