ASICS Gel-Kayano 24: el aliado ideal para vencer #TideOfSui en #ASICSTrials
El tercer reto de #ASICSTrials significó un gran reto para las piernas y la mente, con una ruta en la que el Nevado de Toluca protagonizó el terreno y el Gel-Kayano 24 fue la herramienta perfecta para dominar lo 16 kilómetros de carrera, de los cuales, menos de 2 fueron en terreno plano o descenso: ¡piernas de acero!
La ruta comenzó en el Parque de los Venados, a 3,600 msnm y es ahí cuando descubrimos la comodidad de este clásico, porque con la malla Jacquard en la parte superior, el pie se sentía seguro sin importar el terreno. Con la arrancada, de inmediato sentimos la comodidad creada por dos elementos que me parecieron clave: FlyteFoam y Gel; ambas tecnologías ayudaron a que el terreno se sintiera como correr en nubes gracias a que el GEL da apoyo en las zonas de mayor impacto de nuestra zancada. Con FlyteFoam, una entresuela más ligera, sentías mucho menor impacto en cada caída del pie, no importaba si había piedras, hoyos, ramas, Gel-Kayano 24 se mantuvo estable en cualquier momento.
Después de 5 kilómetros de subida y bajada al inicio de la carrera, vino el reto total: 11 kilómetros de ascenso sin descanso con un desnivel positivo de más de 450 metros, que hubo momentos en lo que las piernas pedían un poco de descanso. El terreno fue agreste por ser montaña, pero Gel-Kayano 24 se comportó como los grandes gracias a la tecnología Dynamic Duomax, la cual consta de un sistema de soporte dinámico que ayuda a mantener la estabilidad de principio a fin, ¡vaya que lo necesitábamos! Porque en el tramo del kilómetro 8 al 11, la montaña nos recibió con los ascensos más agresivos que te obligaban a concentrarte en cada zancada.
Cuando pareció que el reto te daba un respiro, venía el último tramo de 5 kilómetros con ascensos menos agresivos y en los que pudimos entender mejor el beneficio de MetaClutch, porque aunque había piedras y arena que complicaron el agarre de los corredores, está tecnología implementada por primera vez en MetaRun 2016, es un avance que ayuda en la seguridad del talón y agarre en carrera, ahí es donde soltamos la tensión en las piernas y aceleramos para llegar a la meta.
Esos kilómetros finales fueron completamente para disfrutar de los paisajes que nos ofreció un lugar como el Nevado de Toluca. Imponente en cada ascenso, majestuoso en cada kilómetro que recorrimos con nuestros Gel-Kayano 24, pero sobre todo, acogedor desde el primer momento en que corrimos ahí.
