SALVADOR MARTÍNEZ: CORRER CON DIABETES

A la diabetes se le conoce como la enfermedad silenciosa, ya que el 50% de quienes la padecen no lo saben, y en muchos casos, el diagnóstico llega cuando ya es tarde, trayendo consigo muchas complicaciones.

Salvador nos contó que todo comenzó en el verano del 92, cuando todavía era un niño de tan solo 13 años. Los síntomas de la enfermedad comenzaron a manifestarse. De pronto se sentía débil, sediento, con hambre y con ganas de orinar frecuentemente. Un día él estaba trabajando con su padre y comenzó a sentirse muy débil y mareado, por lo que dejó de trabajar y se recostó. Su padre al ser cardiólogo, lo llevó de inmediato al hospital donde lo diagnosticaron con diabetes. Estuvo casi una semana en el hospital y descubrió cómo era vivir con diabetes.


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Al principio no quería que sus amigos supieran de su condición, trataba de seguir su vida normal sin saber del gran peligro que estaba corriendo al no cuidarse. Conforme pasaron los años fue aceptando su condición, hoy en día “considero que la diabetes me ha impulsado a ser una persona consciente de mis acciones, a cuidarme para así poder cuidar a los míos, por lo cual, ahora pienso que más que una dificultad es un recordatorio para ser una mejor persona” dice Salvador.

En el 2011, empezó a correr porque siempre escuchaba a una amiga de su trabajo contar las maravillas de correr, así que decidió comprarse una caminadora. “al principio me sentía como hámster en una rueda, pero poco a poco comencé a notar los beneficios de correr y una de las mejores cosas fue que mi manejo de la diabetes mejoró significativamente”.

Su primera carrera fue una con causa de 10 kilómetros y de ahí no ha dejado de correr y mucho menos de inscribirse a carreras, se convirtió en su pasión. A la fecha ha corrido 8 maratones de los cuales 4 son majors y entre su lista está Boston.

“Me motiva la disciplina, el ejemplo que quiero transmitir a mis seres queridos, compartíendoles que con trabajo, constancia, dedicación y esfuerzo, es posible lograr cosas extraordinarias, me motiva y aprecio también el tiempo que dedico a escuchar mi respiración, sentir mis pasos sobre el asfalto, el sudor en mi cara, el tiempo en el que pienso y resuelvo los asuntos que se encuentran en mi mente y también para dejar de pensar en ellos, a modo de terapia de libertad.”

¿CÓMO ES CORRER CON DIABETES?

Salvador nos contó que la única diferencia es que tiene que monitorar su glucosa antes, durante y después de cada entrenamiento, para así saber las necesiades de su cuerpo. Esta enfermedad no lo límita de ninguna manera, cuida su salud de la misma forma que cualquier atleta lo hace y da lo mejor de si en cada entrenamiento.

“ Considero que el maratón y la diabetes son dos estilos de vida que tienen una relación muy cercana, de los cuales he aprendido y aplico cada día como estilo de vida, en ambos necesitas resiliencia, lucha, empatía, paciencia, perdón, inspiración, constancia, disciplina, control, de modo que gracias a la carrera he aprendido a llevar un estilo de vida en el cual la fuerza y la paciencia son motores que me empujan hacia adelante.”

Salvador quiere dejar en claro que vivir con diabetes es simplemente una condición en la cual requieres poner más atención a algunos aspectos, pero esto no significa el fin del mundo. “En el mundo del Running conocerás personas fantásticas, que sin conocerte te extenderán la mano, te saludarán como un viejo amigo, tendrá las mismas alegrías y preocupaciones que tú y lo más importante de todo, “transmitir que no estamos solos!” dice Salvador.