8 PASOS PARA DISMINUIR EL DOLOR DE RODILLA
Cuando tienes dolor de rodilla, lo más habitual es que se deba al sobreentrenamiento, falta de fuerza o flexibilidad y calzado inadecuado… ¿cuál sería la tuya?
El exceso de entrenamiento, así como el sobrevalorar tus capacidades suelen ser las causas más frecuentes de que tus rodillas digan: ¡basta!
De acuerdo a un estudio realizado en el año 2002 por la Universidad de la Columbia Británica en Canadá, que se aplicó aproximadamente a dos mil corredores, se encontró que el 42% de los participantes que habían tenido lesiones durante su trayectoria deportiva, habían sido de la rodilla.
Banda iliotibial, menisco y tendinitis fueron los tipos de lesión más frecuentes. ¿Tú has sufrido alguno de ellos?
No obstante, debes tener en cuenta que es difícil saber a ciencia cierta dónde estás lesionado cuando sufres una molestia en la rodilla, a menos que lo consultes con un especialista, sin embargo, los cuidados después del dolor son los mismos.
Así que en el momento en que comiences a sentir una molestia en tu rodilla, necesitas tranquilizarte y hacer lo siguiente:
1. Dejar de correr en el momento en que aparezca la primera molestia es la clave para no hacer más grave la lesión. Y también es importante que no vuelvas a salir a correr mientras permanezca el dolor.
2. Aplica hielo (o bolsas de gel) en la zona, unos 10 minutos hasta tres veces al día.
3. Pon las piernas en alto.
4. Toma antiinflamatorios locales u orales, solo con prescripción médica.
5. Cuando desaparezca, prueba otros ejercicios antes de retomar correr: como bici o alberca.
6. Haz ejercicios de estiramiento y fortalecimiento específicos, que luego deberás incorporar a tu rutina.
7. Retoma tu actividad del running con tranquilidad. No te esfuerces desde el principio.
8. Evita principalmente las rutas con mucho desnivel.
