4 técnicas para superar tus objetivos
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Tener nuevos retos deportivos no solo es cuestión de principios de año. Los corredores nos caracterizamos por tener una gran cantidad de metas por cruzar, así que dar un paso adelante, simplemente es parte de nuestras actividades cotidianas.
Y como corredor, es importante saber que en todo momento se presentará una nueva oportunidad de lograr cosas grandes, y aquí te decimos cómo conseguirlo.
Los objetivos de cada runner son distintos, pero pueden llegar a ser bastante similares. A continuación te dejamos algunos de los más comunes. ¿Cuáles agregarías?
Objetivo 1: Correr regularmente.
Tal vez tu práctica deportiva se resume a “corro cuando me acuerdo“. No siempre tenemos ganas de entrenar y lo más sencillo es postergar una carrera, pero ten en cuenta que si lo haces una vez, será más fácil fallar cotidianamente.
Prueba esto: Agenda 4 carreras por semana, donde involucres un día de montaña, uno de velocidad, otro suave, y los fines trata de hacer carrera larga.
Tip: Si te cuesta trabajo dile a tu cerebro “solo voy por 10 minutos“, una vez que hagas ejercicio, será imposible parar.
Objetivo 2: Que no sea aburrido correr.
Ningún runner de hueso colorado permitiría que alguien llamara aburrido a su deporte. Pero aquellos que comienzan, pueden llegar a experimentarlo.
¡No te aburras! Intenta participar en un evento temático como un 5k, donde no tengas estrés por el reloj.
Prueba esto: Una vez que participes en una carrera de este estilo, seguro te motivarás a correr, e incluso, bajar tus tiempos.
Objetivo 3: Ser un poco más rápido.
No todos los corredores ansiamos competir contra los elite, muchos intentamos romper nuestras propias marcas, y para ser más rápido, necesitas carreras largas y trabajo de velocidad.
Prueba esto: Cada semana, haz una carrera larga suave, trabajando cuatro o cinco kilómetros más allá de la distancia que correrás.
Corre 200 metros a ritmo cómodo, después camina la misma distancia. Comienza con 4 repeticiones y llega hasta 10 o 14 antes de tu carrera meta.
Objetivo: Derribar una distancia muy larga.
Enfócate en aumentar distancia en tus días de carreras largas y hazlo a un paso cómodo.
Prueba esto: Incrementa cada semana de dos a tres kilómetros, hasta que estés corriendo 16k si estás pensando en medio maratón, o 32 kilómetros si vas para maratón.
